
El gobernador Osvaldo Jaldo advirtió sobre el riesgo de que organizaciones criminales brasileñas, como el Comando Vermelho (CV) y el Primer Comando Capital (PCC), intenten instalarse en el norte argentino, y confirmó un refuerzo del Operativo Lapacho, el dispositivo provincial que controla los pasos fronterizos en el norte tucumano.“No estamos exentos de que estos grupos lleguen al NOA. No podemos descartar ningún escenario, por eso decidimos fortalecer los controles y sumar recursos tecnológicos y humanos”, señaló el mandatario luego de mantener una reunión de seguridad en Casa de Gobierno con la cúpula policial y funcionarios del área.
El alerta surge tras un mega operativo en Río de Janeiro en el que murieron más de 130 personas durante enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y miembros del Comando Vermelho. Según fuentes oficiales de Brasil, algunos de los cabecillas habrían escapado hacia países limítrofes, lo que llevó a la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, a emitir una alerta nacional y ordenar mayor control en las zonas fronterizas del norte argentino.
En Tucumán, Jaldo analizó la situación junto al ministro de Seguridad y al jefe de Policía, Joaquín Girvau, en el marco de una evaluación del trabajo realizado durante el año. “Lo que está pasando en Brasil es gravísimo. Si estos grupos se establecen en el NOA, afectarían directamente la seguridad pública. Aunque seamos una provincia, vamos a hacer todo lo posible para evitar su desembarco”, enfatizó el gobernador, quien también confirmó que se están desarrollando tareas de inteligencia preventiva en la provincia.
Durante el encuentro, Girvau presentó un informe estadístico que muestra una baja del 50% en los homicidios y una reducción del 30% en los delitos contra la propiedad respecto al mismo período de 2024. “Vamos a hacer sentir la presencia policial en todo Tucumán. No toleraremos desórdenes ni disturbios: quien los provoque será detenido”, advirtió el jefe policial, al confirmar que se reforzará la operatividad en noviembre y diciembre.
Jaldo subrayó que Tucumán atraviesa la segunda y última etapa de su gestión, y destacó la necesidad de fortalecer la seguridad preventiva y el sistema carcelario, al tiempo que pidió evaluar nuevas alternativas de alojamiento para detenidos ante la posibilidad de saturación del sistema penitenciario en 2026.
Además, la reunión sirvió para delinear los operativos de prevención para las fiestas de fin de año y la temporada turística, con el objetivo de garantizar tranquilidad en todo el territorio provincial. “Los indicadores son positivos, pero no nos vamos a confiar. Tucumán seguirá trabajando con firmeza para mantener la paz social”, concluyó el mandatario.