Maravillosa noche
No se va nadie. No pueden porque primero tiene que desconcentrarse el público visitante, claro. Pero si tuvieran la posibilidad de elegir, igualmente se quedarían en el Cilindro. “Olé, olé, olá, cada día te quiero más”, se canta en cada rincón del Cilindro. Y la melodía acompaña el final, que termina con aplausos. Con el deseo de ser volver a ser campeón. Sí, así jugó Racing. Con sentido de pertenencia, con amor por la camiseta. Con orden, intensidad y contundencia. Con el mismo espíritu guerrero con el que conquistó la Sudamericana, no solo venció a Botafogo; redujo a la mínima expresión al ganador de la Libertadores, ni más ni menos. Fue 2 a 0 y el resultado quedó corto. La revancha de la Recopa será el jueves en Brasil. La serie está abierta, claro. Pero la Academia llegará a Río de Jan...








